PEPE ha vuelto y no es una broma. El token de la rana que empezó como una simple broma en internet está acumulándose silenciosamente mientras todos están pendientes de que Bitcoin alcance nuevos máximos históricos. ¿Lo más sorprendente? Las carteras activas aumentan, el volumen de comercio se dispara y el gráfico finalmente muestra algunos signos de fortaleza real.

Seamos honestos—en el mundo de las memecoins, el hype ES el producto. Y PEPE ahora mismo tiene mucho hype en marcha. Los traders minoristas están entrando con FOMO, las ballenas están acumulando en silencio, y el sentimiento en X está alcanzando un punto álgido otra vez.

¿Podrá romper resistencias anteriores? Quizá. ¿Sorprenderá a quienes lo dieron por muerto? Ya lo está haciendo. La verdadera pregunta no es si PEPE puede subir, sino si en esta ocasión el impulso se mantendrá o si solo será otro ciclo de altcoins que termina en decepción.

De cualquier forma, la narrativa de las memecoins sigue escribiéndose sola. Y aparentemente, PEPE aún no ha terminado su capítulo.