Las caídas excesivas en el mercado suelen rebotar, y cuando suben, es natural que haya retrocesos — esto es parte del juego normal.

Muchos están atentos a la barrera de los 100,000, preocupados por si se mantendrá o no. La verdad es que, tarde o temprano, caer por debajo de ese nivel es inevitable, pero en este momento seguramente habrá una lucha constante por ese precio. ¿Por qué? Porque en esa zona ya hay una gran cantidad de órdenes de compra acumuladas. Pero el problema es que todavía no se sabe si la próxima bajada de la Reserva Federal será o no, y esa incertidumbre genera un sentimiento de pánico que no desaparecerá de inmediato.

Para cambiar la situación, se necesita que haya suficiente capital institucional entrando continuamente en el mercado, impulsándolo y dándole apoyo. Pero mira, ahora el gobierno de EE. UU. ha entrado en un cierre sin precedentes, una situación completamente desordenada; la postura de la Reserva Federal también es ambigua, nadie se atreve a hacer promesas. En este contexto, ¿de dónde sacan confianza los alcistas?

Por eso, la conclusión es clara: si los alcistas no pueden levantar el mercado, solo queda que siga bajando. La línea de los 100,000 probablemente no se mantendrá. Personalmente, creo que antes de fin de año, Bitcoin seguirá bajando. Ya lo mencioné hace unos días: el mercado podría estar entrando en una fase de transición entre mercado alcista y bajista, y antes de fin de año, los bajistas dominarán. Si realmente rompe los 90,000 o incluso los 80,000, no sería imposible que el próximo año comience un mercado bajista. Esto también puede ser una especie de advertencia para el año que viene.