¿Cuál es el problema más doloroso en la era de múltiples cadenas? Cada cadena juega por su cuenta, la transferencia de activos es increíblemente lenta, las tarifas son tan altas que duelen, y la experiencia del usuario está hecha trizas.

Espresso está redefiniendo la colaboración entre cadenas con un conjunto de soluciones de "ordenador compartido". En pocas palabras, permite que diferentes blockchains se comuniquen en un "idioma" unificado en tiempo real, sin rodeos, garantizando tanto la seguridad como la eficiencia.

Recientemente ha habido mucho movimiento: la cadena principal ya está funcionando oficialmente, después de haber pasado por varias rondas de pruebas. La capa de consenso central ya está operando en línea. Lo más importante es que la velocidad de expansión del ecosistema es muy rápida, cada vez más proyectos comienzan a integrarse en esta infraestructura.

La interoperabilidad entre cadenas ha sido un punto crítico en la industria, y ahora finalmente hay quienes están tomando medidas serias en la arquitectura subyacente. Si el camino del orden compartido puede ser exitoso, la liquidez y la experiencia del usuario en todo el ecosistema multichain darán un gran salto.