Seamos realistas por un segundo. ¿La mayoría de las plataformas de trading centralizadas? Son básicamente casinos disfrazados. Interfaces llamativas, opciones de apalancamiento que gritan "arriesga todo" y características diseñadas para mantenerte pegado a la pantalla—gráficos que se actualizan como máquinas tragamonedas.

La gente entra pensando que está construyendo carteras, haciendo movimientos estratégicos. Pero la casa siempre gana, ¿verdad? Bots de trading de alta frecuencia, cascadas de liquidación, traders minoristas emocionales siendo rekt con un apalancamiento de 50x... ¿suena familiar?

No digo que todas las plataformas operen de esta manera. Algunas realmente se centran en la educación, herramientas de gestión de riesgos, incentivos para la tenencia a largo plazo. Pero la industria tiene un problema de juego que se niega a admitir. Y hasta que no separemos la inversión real del teatro de pura especulación, nada cambiará.

Quizás es hora de que dejemos de pretender lo contrario.