Muchas personas creen que el aumento de la tasa de interés es una información favorable para todo el sistema financiero, pero en realidad no es tan simple.

Parece que una política muy sencilla ha generado una gran diferenciación entre las instituciones financieras. Los grandes bancos están en una posición favorable, porque tienen una base de depósitos suficiente para absorber nuevos fondos, lo que les da más margen para trasladar costos. Pero las instituciones financieras medianas y pequeñas son diferentes: la estructura de plazos de sus activos es demasiado larga, y el margen de interés se ha visto comprimido, lo que les mantendrá bajo presión continua.

El sistema bancario japonés está atravesando actualmente este proceso. La política de aumento de tasas de interés está ampliando de manera invisible la brecha de capacidad entre las instituciones. El efecto Mateo, donde los fuertes se vuelven más fuertes y los débiles más débiles, se manifiesta de manera especialmente evidente en el ámbito financiero. Por lo tanto, no te fijes solo en la superficie de las políticas, hay que observar quién realmente se beneficia y quién sufre pérdidas de manera pasiva.