Los metales preciosos han despegado este año, el oro ya ha superado la barrera de 3400 dólares, con un aumento de más del 66% en el año. La plata se sostiene por encima de los 34 dólares, y el platino también ha superado los 2000. En Goldman Sachs incluso han pronosticado que el oro podría alcanzar los 4900 dólares el próximo año. La lógica detrás de esto no es más que la expectativa de recortes de tasas por parte de la Reserva Federal (FED), la inestabilidad de la situación geopolítica global y la debilidad del dólar.

En contraste, el ambiente en el lado de las criptomonedas se ha enfriado bastante. Bitcoin ahora ronda los 88000 dólares, y en todo el año ha caído un 5%. Los alcistas todavía esperan que antes de Navidad haya un repunte festivo, superando los 98000 e incluso llegando a los 100000 dólares. Su argumento es que los ETF institucionales continúan comprando y que la política favorable a las criptomonedas de Trump está a punto de implementarse. Pero la voz de los bajistas también es fuerte, estableciendo objetivos de corrección en 70-75000 dólares, y algunos pesimistas comienzan a discutir si el mercado bajista se extenderá hasta 2026.

El índice de miedo y codicia del mercado solo es 24, en un modo de puro miedo. La cantidad liquidada en 24 horas alcanzó los 172 millones de dólares, se puede imaginar cuán feroz ha sido la lucha entre los toros y los osos.

En comparación, Ethereum parece tener más calma. El precio se mantiene por encima de los 3000 dólares, las ballenas continúan acumulando y los datos en cadena también son buenos. Si logra romper hacia arriba, el rango de 3200-4200 tiene puntos de interés; si cae, el soporte está en 2700-2800. En términos de espacio y posibilidades de rebote, ETH parece tener más oportunidades que Bitcoin.

Las altcoins pueden estar animadas, pero la sombra de la "temporada de altcoins" aún no se ha visto. Aave ha sido golpeado recientemente por grandes titulares, y la comunidad tuvo un desacuerdo por una propuesta de transferencia de activos. Para impulsar las altcoins, hay que depender de nuevas narrativas como el ecosistema de Solana y Ethena.

Los datos de ETF también pueden explicar bastante. Los ETF de Bitcoin y Ethereum han tenido salidas netas de cientos de millones de dólares, mientras que Solana y XRP han tenido pequeñas entradas. Todo el mercado está realmente estancado en una encrucijada: el entorno macroeconómico favorece los activos tradicionales de refugio seguro, mientras que en cripto, a corto plazo, todavía predomina la volatilidad.

¿Es posible un mercado navideño? Sí, pero no esperes demasiado del mercado. Debes estar atento a la presión en los niveles técnicos, los puntos de entrega de opciones y los datos del PIB de Estados Unidos. Al final, sigue siendo esa vieja frase: el riesgo es responsabilidad de cada uno.