Argentina, Nigeria, Turquía: las monedas de estos países están perdiendo valor a una velocidad de decenas de puntos porcentuales cada año, o incluso más. Para los residentes y comerciantes locales, esto ya no es un juego numérico de los libros de texto de economía, sino una lucha diaria por la supervivencia. Ahorrar significa ver evaporarse los activos; solo quienes lo han vivido pueden entender lo desesperante que es esta sensación.
Muchas personas quieren cambiar su dinero por dólares para evitar riesgos, pero surge un problema: hay pocos canales, son caros y el proceso es complicado. Tomemos como ejemplo a Nigeria, donde las comisiones para cambiar dólares a través de bancos son exorbitantes y la transferencia tarda varios días en llegar. ¿Un pequeño comerciante que quiere recibir transferencias en dólares de clientes extranjeros? Es una verdadera pesadilla, ya que todos los costos de los intermediarios finalmente se trasladan al precio de los productos. El mercado anhela un vehículo de valor en dólares que sea de bajo costo, estable y fácil de obtener, casi está escrito en el rostro de todos.
Alguien ha comenzado a abordar este problema desde otra perspectiva. Un proyecto ha lanzado una moneda estable sintética respaldada por una colaboración con una nueva generación de marcos de pago: esta red de pagos ya cubre a más de 500,000 comerciantes en todo el mundo, con un enfoque especial en regiones como el sudeste asiático y África. Imagina que los residentes pueden convertir directamente su moneda local, que se deprecia continuamente, en activos estables en dólares, los costos de pagos transfronterizos disminuyen drásticamente e incluso pueden obtener ciertos rendimientos. Esto no es solo una herramienta de inversión, sino más bien una infraestructura financiera personalizada para regiones con alta inflación.
Cuando los obstáculos del sistema financiero tradicional son tan altos que las personas comunes no pueden acceder, las nuevas soluciones tecnológicas ofrecen un camino más directo. Esta transformación de valor práctico podría ser la historia más real de las monedas estables en los mercados emergentes.
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gas_fee_trauma
· 12-23 14:56
Esto es lo que debería hacer una moneda estable, no especular con conceptos, sino resolver problemas de verdad.
Argentina, Nigeria, Turquía: las monedas de estos países están perdiendo valor a una velocidad de decenas de puntos porcentuales cada año, o incluso más. Para los residentes y comerciantes locales, esto ya no es un juego numérico de los libros de texto de economía, sino una lucha diaria por la supervivencia. Ahorrar significa ver evaporarse los activos; solo quienes lo han vivido pueden entender lo desesperante que es esta sensación.
Muchas personas quieren cambiar su dinero por dólares para evitar riesgos, pero surge un problema: hay pocos canales, son caros y el proceso es complicado. Tomemos como ejemplo a Nigeria, donde las comisiones para cambiar dólares a través de bancos son exorbitantes y la transferencia tarda varios días en llegar. ¿Un pequeño comerciante que quiere recibir transferencias en dólares de clientes extranjeros? Es una verdadera pesadilla, ya que todos los costos de los intermediarios finalmente se trasladan al precio de los productos. El mercado anhela un vehículo de valor en dólares que sea de bajo costo, estable y fácil de obtener, casi está escrito en el rostro de todos.
Alguien ha comenzado a abordar este problema desde otra perspectiva. Un proyecto ha lanzado una moneda estable sintética respaldada por una colaboración con una nueva generación de marcos de pago: esta red de pagos ya cubre a más de 500,000 comerciantes en todo el mundo, con un enfoque especial en regiones como el sudeste asiático y África. Imagina que los residentes pueden convertir directamente su moneda local, que se deprecia continuamente, en activos estables en dólares, los costos de pagos transfronterizos disminuyen drásticamente e incluso pueden obtener ciertos rendimientos. Esto no es solo una herramienta de inversión, sino más bien una infraestructura financiera personalizada para regiones con alta inflación.
Cuando los obstáculos del sistema financiero tradicional son tan altos que las personas comunes no pueden acceder, las nuevas soluciones tecnológicas ofrecen un camino más directo. Esta transformación de valor práctico podría ser la historia más real de las monedas estables en los mercados emergentes.