Cuando tu cartera está sangrando rojo, todo se siente imposible. Pierde cinco cifras de la noche a la mañana y, de repente, tu pareja todavía está preguntando sobre los planes de cena. ¿En serio? Podríamos estar ajustando nuestros cinturones durante semanas, y tú estás pensando en reservas? Esa es la vida cripto de la que nadie habla: el estrés financiero no solo afecta tu billetera, afecta toda tu vida. Las caídas del mercado no son solo números en una pantalla; son una presión real cuando las facturas se acumulan y tus holdings siguen cayendo.