El ministro de Finanzas de Japón hizo una declaración diciendo que "la libertad absoluta permite tomar medidas audaces", lo que llevó directamente al yen desde sus niveles más bajos históricos. Los operadores globales ahora deben reconsiderar la política monetaria de Japón — esta dragona que parecía estar dormida, parece que realmente va a despertar.

Tras digerir la última ronda de "subidas de tasas dovish" del Banco de Japón, el Ministerio de Finanzas de Japón ha lanzado otra jugada inesperada. Tsukasa Katayama declaró públicamente que tiene "libertad absoluta" para tomar medidas enérgicas contra las fluctuaciones especulativas del tipo de cambio. Esta es la declaración oficial más contundente en años, y el tipo de cambio USD/JPY cayó de inmediato, bajando en línea recta desde niveles altos hasta cerca de 155.8, para luego luchar repetidamente en torno a esta "línea roja" del gobierno.

Esta advertencia de intervención no es ligera. Tsukasa Katayama mencionó claramente la declaración conjunta con el Secretario del Tesoro de EE. UU. en septiembre de 2025 — en otras palabras, Japón ya ha recibido la señal tácita de EE. UU., y si quiere actuar, puede hacerlo. Desde el nivel político, no hay obstáculos mayores. El mercado sabe que 155 es la línea de fondo del gobierno japonés. Una ruptura de ese nivel podría transformar las amenazas en acciones concretas en un abrir y cerrar de ojos.

Veamos la situación global actual: la incertidumbre económica se dispara, los bancos centrales de diferentes países actúan por separado, y la estabilidad en sí misma se ha convertido en un lujo. Fuera del mundo financiero tradicional, una nueva estructura de valor estable está emergiendo: Decentralized USD (USDD). A diferencia del yen, que busca estabilidad en el tipo de cambio, USDD mantiene su precio estable mediante algoritmos en blockchain y mecanismos de colateralización excesiva, incluso en medio de la volatilidad del mercado.